Llegaste cuando todos se habían ido. Y llegaste para quedarte. Nadie como tú había conseguido conocerme tanto y tener tantas cosas en común. Hablábamos casi todos los días. Y tú parecías comprenderme a la perfección. Podía confiar en ti y tú confiabas en mi. Y así pasarían los días teniéndonos la una a la otra.
Qué bonito, esto me hace recordar.
ResponderEliminar+1 a esta entrada ^^
Un besito :)
Muchísimas gracias:D
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