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sábado, 17 de octubre de 2015

1.


Hacía tiempo que no había una voz, un sentimiento nuevo que me impulsase a escribir. Pero quizás sea los recuerdos de ese mismo nuevo sentimiento los que me han llevado a abrir esta nueva entrada y escribir cada una de las palabras que simplemente fluyen de mi.
Han pasado tres años desde que sentía eso, y realmente siento que estoy en el mismo punto mientras todo a mi alrededor ha cambiado.
Mis principios son lo único bueno que he adquirido. Ese anhelo de libertad, de querer cambiar el mundo porque cada cosa que me rodea no me pertenece, las ganas de vivir que no pueden perderse...gracias por haberme hecho llegar a esto.
Ahora quiero escribir, dedicarme a la fotografía incluso, ver a la persona que amo y me quiere y sonreír. Porque sé que hoy no me voy a morir, y es maravilloso sentir que me queda mucho, aunque el tiempo sea un gran hijo de puta...una batalla a contrarreloj contra el propio tiempo, sintiendo el sol en mis dedos.
Puede que alguna vez olvide todo esto. Mi anarquía, mi odio eterno al capitalismo y a la gente que no lucha tan siquiera por ser feliz y se ha inundado de importancia hacia esto.
El odio, el dinero, mi inmadurez, mis sueños, mi amor propio, mi primer amor y el hombre de mi vida, las ganas de coger una mochila y no volver más todavía condicionan todo.
Créeme que sólo quiero volar, dejar de hacer textos para lengua cuando considero que mi escritura podría ser perfecta...
no quiero dejar de soñar, no quiero amargarme en un quizás.
'y me arrastré como he hecho a lo largo de toda mi vida detrás de la gente que me interesaba, porque la única gente que me interesa es la que está loca...la gente que esta´loca por vivir, loca por comunicarse, deseosa de ternerlo todo al instante, la que nunca bosteza ni habla de lugares frecuentes si no que arde, arde y arde como bengalas en mitad de la noche...''