276.

Con tal de perderme, podría surcar olas. ¿Quién soy? Un alma en un cuerpo cualquiera. Como tú, como ellos. Y podrías enamorarte de este alma, como yo de tu pelo, ese pelo el cual agarraba mientras follábamos días atrás. Siempre buscaba escribir algo que mereciese la pena. Algo con algún mensaje secreto, algo que revelase lo que realmente sentía.
No supe entender que para que me quisieses, primero, debía amar los ojos, el culo y el vientre que se me habían asignado.
¿Y ahora? ¿Todavía tengo esa posibilidad? La posibilidad de mostrarte mi alma. Porque me he aceptado y puedo dejar de lado mi máscara.
Como ese perro que en este mismo instante, acaba de pasar, con un zapato en la boca. Yo, podría ser tu aire. Y es cierto, que nunca se me ha dado bien querer. Nunca he querido aprender que si te caes, debes tender tu propia mano para conseguir levantarte. Con autonomía o independencia.
Déjame ser esa persona que recuerdes cuando digas: ''Si quiero.''
Chico, podría enamorarte. Podría ser esa pintada en la pared que leerás en cuanto pases.
Porque, nunca es tarde.