Seguidores:

lunes, 26 de noviembre de 2012

263.

Como añoraba el verano me había dicho hoy, ayer y hace una semana. Mientras miraba por la ventana viendo lo temprano que anochecía y las gotas de la lluvia que descendían por la ventana recordaba aquellas mañanas de paseos por la playa cuando nada importaba. Donde el tiempo no pasaba ni el dolor existía. Ojala pudiese salir de estas cuatro paredes, salir o revéntarlas. Dejar de estudiar por un momento, un segundo sin preocupaciones sobre si tengo que entregar un trabajo o sobre tener que levantarme a las siete de la mañana. Correr hasta quedarme sin respiración y cuando eso ocurriese gritar, saltar, llorar, bailar. Sonreír. Pero no puedo, por ahora no, pero, como una vez me dijeron, estamos aquí esperando que llegue algo por lo que esperar. Así que seguiré esperando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario