Seguidores:

martes, 5 de marzo de 2013

278.

Abrázame, conviértete en mi manta aunque ya haya salido el sol. Hazme esperar hasta las tantas aunque aparezcas conectado desde horas tempranas, pero, háblame. Hazme decir tonterías mientras tú también las dices. Llámame loca y yo te llamaré idiota. Déjame llamarte, mantener largas conversaciones telefónicas. Entonces, quedaremos de vez en cuando y no rehusarás a la hora de besarme. Abrázame cuando acuda a ti dando saltos porque estás ahí. En la primera cita, olvida al sexo, perdiéndonos por algún lugar poco transitado. Dame eso durante unos pocos días, dos meses o un tiempo indefinido.
Sé que te irás. Que habrá un día que por mucho que mire a mi alrededor, que por muchas calles que recorra, no te encontraré, no te encontraré en ninguna.
Pero, permíteme conocerte y que me conozcas mejor. Que puedas enamorarte de mi mientras yo te entrego todo. Un día, una hora. Pero déjame deleitarme con el placer de habernos encontrado en esta vida.
No te vayas sin dejar una huella imborrable. Hazme tuya, hazme sufrir y hazme feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario