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martes, 10 de julio de 2012

203.

Veronika era joven, atractiva, podía llevarse a la cama a cualquier chico que se propusiese. Más bien ya lo hacía. Tenía gran cantidad de amigos y amigas y una estabilidad familiar envidiable.
Un día cualquiera se despertó rodeada de tubos y máquinas. No. No tenía anorexia ni nada parecido. Una monja que era la encargada de vigilar cada una de las habitaciones de una residencia para jóvenes a los cuales les gustaba vivir siendo independientes la había encontrado tirada en el suelo de su cuarto y apresuradamente se dispuso a llamar a una ambulancia. Las causas de eso fueron que se había tomado una caja de pastillas para dormir en cantidad exagerada para suicidarse sin dar completado su objetivo. Su corazón estaba dañado y según el médico le quedaban unos pocos días de vida. Ella deseaba morirse ya. Estaba cansada. Sin ganas aparentes de vivir mientras sus padres lloraban. Ella estaba internada en un psiquiátrico llamado Villete. Puede que suene estúpido. A mi no me lo pareció. Allí rodeada de gente que la sociedad catalogo como ''loca'' supo encontrar las ganas de vivir que le faltaban a pesar de que fuese ya demasiado tarde para ella. Al borde de la muerte. Se enamoró de un esquizofrenico. Lo que le pareció una locura. Pero no tenía tiempo para plantearse lo que era correcto. Ahora ya no.
' Y yo digo, que prefiero estar loca ahora mismo y que me juzguen por ello. Que hacer todo eso que ellos creen correcto y yo considero monótono y aburrido.' 
P,d: Esta historia está basada en el libro 'Veronika decide morir.' de Paula Coelho. Recomiendo que lo lean aquellos que estén amargados, sin ganas de vivir o cansados. En serio. Es genial.

4 comentarios:

  1. La verdad es que aunque breve, es intensa esta pequeña historia. Si el libro es así seguro que merece la pena.

    Un saludo :)

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  2. Me gusta me gusta :)
    gracias por pasarte un beso <3
    belendaleaeso.blogspot.com

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  3. Oh, este libro lo he leido. Me encantó, el final te deja un poco sorprendido.

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