Seguidores:

lunes, 30 de julio de 2012

213.

Oigo mis latidos. Estoy en mi habitación. En el ambiente, un notable silencio. En la habitación de al lado, mis padres. Deben de ser ya las 3 de la madrugada por lo que deben de estar durmiendo. Me dispongo a coger un cuchillo. El que más daño pueda producir, el más afilado. Antes de producir cualquier tipo de daño, me dispongo a pensar el sitio adecuado para no ser descubierta, siendo cierto que parecía que a mi madre no le importaba mucho verme cortes. Sé que la gente me tomaba por loca al hacer algo así. Yo no lo veo así. Sé que el ser humano tiende a la autodestrucción. También se que yo hago lo que quiero con mi vida. ¿Qué por qué lo hacía? Porque creía que no podía más. Y sí. Todo eso ha quedado en el pasado. Y con ello cicatrices que no se borraran pero nunca diré que me arrepiento.

6 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Hay muchos libros de autoayuda y no se, tienes que hacerte fuerte sea como sea,

      Eliminar
    2. Estás pasando por eso? Mira depende si lo haces mucho o no, siempre hay que buscar ayuda.

      Eliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Dios, esta entrada es tan asdfghjk, enserio me encanta *-*

    ResponderEliminar